A LA BÁSCULA

¿Cambio de caballo a mitad del río?

Julián Parra Ibarra

Al presidente norteamericano Abraham Lincoln se le atribuye la autoría del adagio de ‘No cambies de caballo a mitad del río’, que palabras más, palabras menos, significa que cuando se empieza algo de alguna manera así hay que terminarlo. Un dicho popular mexicano reza que: ‘Cuando el río suena, es que agua lleva’.

¿A qué viene ese entrelazamiento de adagios y refranes?

Al rumor que se ha venido corriendo en los días recientes en el estado de Durango que, desde las más altas esferas de este país, se está considerando la posibilidad de hacer un cambio en la candidatura de la alianza Juntos Haremos Historia -o lo que es lo mismo, Morena- para la gubernatura del estado.

De acuerdo con la especie, la intercesión del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, una de las pocas personas en este país a quien el Presidente trata y ve con respeto, le habría solicitado que dejara en manos de José Ramón Enríquez, la candidatura morenista al gobierno del estado de Durango.

Evidentemente que hasta el momento se trata no más de un trascendido, y podría hasta en un momento dado tratarse de un ‘fuego amigo’ contra la que hasta ahora es la candidata morenista, Marina Vitela Rodríguez, pero lo cierto es que, a partir de esta semana, el propio Enríquez tuvo un encuentro con su gente más cercana para pedirles que reactivaran con mayor fuerza los trabajos con las estructuras.

A gente de La Laguna afín a su proyecto incluso, los concentró desde el martes en la capital del estado para dejarles en sus manos la encomienda de trabajar a marchas forzadas algunos trabajos a ras de campo que se habían venido debilitando. Aunque tenía agenda para miércoles, jueves y viernes en la entidad –este jueves, por cierto, en La Laguna-, muy tempranito este miércoles voló a la capital de la República, a donde fue convocado.

Si bien es cierto que los expertos politólogos no recomiendan nunca ‘cambiar de caballo a mitad del río’, lo cierto es que los números alegres que en materia de preferencia electoral mantenía Morena en Durango hasta el cierre del año pasado, se han caído estrepitosamente en estos casi tres primeros meses de 2022, y cuando más cerca está la fecha del inicio de las campañas electorales, el 3 de abril, al grado que el abanderado de la alianza. Va por Durango, Esteban Villegas Villarreal ha logrado remontar los números y para no variar, siguiendo con los términos equinos, en la política también se estila aquello de que ‘caballo que alcanza, gana’.

La semana pasada, en la columna ‘Frentes políticos’, del periódico Excélsior, se comentó que en Morena ya daban por perdidos los estados de Aguascalientes y Durango, y escribieron: “Morena va rumbo a la derrota en Aguascalientes con Nora Ruvalcaba, y también en Durango, donde el senador José Ramón Enríquez se quedó a la orilla de la candidatura, cedida por una encuesta a favor de Marina Vitela. Y, como da por hecho que perderá esas plazas, se optó por desacatar al INE.

Tras oficializarse la candidatura, semanas atrás, incluso, Mario Delgado, líder morenista sufrió los gritos y sombrerazos de su propia militancia en la región, por ello Morena busca con esta jugada posicionarse. Pero, demasiado tarde. Esteban Villegas y la alianza PRI-PAN-PRD van 8 puntos arriba. Ya les comieron el mandado”.

La posibilidad de un eventual cambio de candidatura en Morena, sería una catástrofe para la alcaldesa de Gómez Palacio con licencia. De acuerdo con los propios números de las encuestas ordenadas por Morena para la definición de sus candidaturas, José Ramón Enríquez resultó no solo el mejor calificado entre los contendientes de la interna, sino como el único que podría aspirar a darle al partido del presidente el triunfo en Durango.

Y con todo y el riesgo que cambiar de caballo a mitad del río, esa podría ser en estos momentos, la única posibilidad de una eventual recuperación de Morena en las preferencias electorales de los duranguenses. De confirmarse esta versión, el movimiento tendría que ser a la voz de ya, antes de arranque de las campañas electorales, que están ya a la vuelta de la esquina, a 12 días de distancia.

Como quiera que sea que se definan las cosas, así fuera una ratificación en la candidatura de Marina, todo el ruido que se ha generado en torno a ella, creció por la soberbia y la falta de capacidad de negociación y contar con cabilderos profesionales, para haber establecido una negociación con José

Ramón Enríquez, desde el momento en que Mario Delgado hacía publica la candidatura de Marina Vitela Rodríguez. Lo ignoraron, lo dejaron vivo, y se les convirtió en un serio problema que, con el tiempo ya no pudieron ni supieron cómo resolver. Faltan unos días para saber cuál será al final de cuentas, el rumbo que Morena va elegir en Durango en la lucha por la gubernatura.

laotraplana@gmail.com

@JulianParraIba