SANTOS QUISO CONGRACIARSE CON SU AFICIÓN; NO PUDO

Presentaron al inicio una pancarta

donde se leía “hoy te necesito a ti”

Pedro Caixinha, parecía “chiquito” detrás del contingente que encabezó Oswaldo

Pareciera un festejo del Día del Niño, pero más bien, los jugadores del Santos sabían del compromiso que tenían con su afición, salieron apiñonados, medio tiesos, sin esa alegría que mostraron en todos los partidos anteriores cuando Rafael Rosssell, al inicio del partido, menciona los nombres de cada uno de los actores de este “teatro”, en donde, defnitivamente un equipo tendrá que salir triunfador.

En la escena de ayer, se levantó el telón con un poema que intentó penetrar en los corazones y las conciencias de los pocos aficionados que a esa hora se encontraban en el Corona, lucieron con poco humor, mostraron una lona donde se podía leer: “hoy te necesito a ti”, con la que trataron de congraciarse con la afición; no lo lograron, faltaba más del 60 por ciento de aficionados que cotidianamente llegan hasta el TSM.

Aparecieron en el escenario, figurines como Hulk, Woody de Toy History, La Parka, El Chavo del 8, Quiko, El hombre Araña verde y rojo y la Chilindrina....esperaban que el espíritu recién pasado del Día del Niño repuntara pero no lo lograron, así que el juego tuvo que iniciar con un Santos indefenso ante los constantes ataques del Monarcas que intentaron penetrar la porteria de Owaldo quien defendió con garra, fallaba la ofensiva guerrera, la media y la defensa, parecía que Owaldo enfrentaría sólo la auforia a favor y en contra de los aficionados que a poco, casi llenan el TSM.

Vinieron los goles, el primero al minuto 34 de Héctor Mancilla que perforó el orgullo de los aficionado más que la portería de Owaldo, la obra de teatro no alcanzaba todavia la mitad.

El segundo tanto fue producto de los pies del camiseta 10 Joao Rojas  en el minuto 42 por lo que “Los Guerreros” de Caixinha se fueron al descanso desmoralizados. Oswaldo no podría sólo con la tempestad.

La afición, mientras tanto, en el intermedio abucheó los promocionales de la directiva santita reflejados en la camiseta oficial donde indicaban que mil 200 aficionados habían quedado grabados. Estefanía Castro dijo haber tomado mucho para ser incluída y los gritos de “Buuu” “Buuu” la acompañaron.

El señor Juan Antonio Martínez, cobijado en la sombra de la cabecera norte en el estadio, no estaba conforme, esperaba que el equipo de sus amores repuntara, sedjo santista desde la antigüedad, cuando El Laguna y replicó “está fallando la media, la ofensiva y la defensa, Oswaldo está luchando sólo, el juego puede cambiar, tenemos un equipo que puede dar la vuelta”.

Por su parte, Don Carlos Ramírez, habitante de la colonia Valle Oriente y asiduo asistente al Corona dijo. “yo sabía que Santos perdería con Los Rayados, pero espero que le gane al Monarcas, es el peor equipo y tenemos en Torreón garra para cambiar el destino”.

Esos eran los deseos de los aficionados, la obra de teatro del sábado por la noche en el TSM continuaba, Oribe quiso salvar el honor de “Los Guerreros” y metió el eférico en la portería de Enrique Pérez en el minuto 60. Las esperanzas repuntaron. El Santos quiso congraciarse con su afición. Oswaldo representó la contingencia al inicio del partido y defendió hasta lo imposible su portería, sin embargo, declinaron el honor de rendirle tributo a su afición, simplemente, Santos no pudo congraciarse con su afición que le ha demostrado amor en la buenas y en las malas. El telón se cerró y el marcador final quedó 2 goles por 2 favor Morelia, de Carlos Bustos, mientras que Pedro Caixinha, desde un principio lució “chiquito”, enfundado en su tradicional traje gris oscuro como oscuro fue su semblante.